Brujo rúnico

Hoburns, la capital del Reino Santo despertó como siempre, con los rayos del sol alumbrando las calles mientras aquellos cuyo día comenzaba temprano salían a cumplir con sus rutinas. La ciudad estaba patrullada por paladines de brillantes armaduras que mantenían el orden; los civiles seguían con su vida sin enterarse de los grandes problemas que aquejaban al mundo; Los aventureros salían de la ciudad a cumplir sus misiones y los reclutas entrenaban desde el amanecer.

Todo era como se supone que debía ser.

Tal vez en la gran muralla, allá donde la guerra y la muerte era el pan de cada día, una visión tan pacífica como aquella sería imposible, pero esto era Hoburns, la capital y el lugar más seguro del reino, por lo que la gente estaba felizmente inconsciente de los peligros más allá del muro.

Este habría sido otro día más en la vida de la Reina Santa Calca Bessarez de no ser por el mensaje que le trajeron sus asistentes un poco más temprano. Al parecer Lurent Rolland, un comerciante al que no había visto en persona por casi diez años, había solicitado una audiencia de emergencia llegando hasta el punto de utilizar un pergamino otorgado por el anterior Rey, el padre de Calca, al hombre como recompensa y que permitía, por una única vez, solicitar una audiencia con el rey, en este caso reina, y este deberá concederla sin demoras.

Lo extraño es que Rolland era un comerciante muy reconocido en el reino y si él solicitara una audiencia, a menos que sea una situación de emergencia, sería aceptada sin problemas. El hecho de que incluso así prefiriera usar el permiso que solo podía invocarse una vez le dejó un poco de incomodidad a Calca.Sus asistentes de mayor confianza, Kelart y Remedios Custodio, no estaban seguras de que fuera buena idea recibir al hombre que, según sabían, había estado desaparecido en altamar por al menos 3 días y al regresar lo primero que hizo fue a buscar a la reina, pero al mismo tiempo entendían que si el motivo de su desaparición tenía que ver con lo que vendría a decir no había otra opción más que escucharlo.

Eran las 10 de la mañana cuando las puertas del salón del trono se abrieron luego de que Lurent Rolland fuera anunciado. Al entrar al lugar notó que solo estaban la Reina Santa y las hermanas Custodio, que servían como consejeras y guardaespaldas, a ambos lados del trono. Sin demorarse más, se dirigió hasta el frente del trono y se arrodilló ante su Reina.

- Por favor levante la cabeza, sr Rolland – dijo Calca con voz suave y una vez que Lurent obedeció volvió a hablar. – Debo admitir que me encuentro un poco confundida, sr Rolland. Que usted, quien puede conseguir una audiencia casi en cualquier momento, venga tan apresuradamente a verme luego de un retraso considerable en su itinerario de viaje es, cuanto menos, intrigante.

- En primer lugar, debo agradecer a Su Majestad por haberme recibido incluso cuando llegué sin previo aviso y con una actitud que francamente haría sospechar a cualquiera – respondió el comerciante con una sonrisa seca.

- Al menos eres consciente de tu actuar sospechoso. Más vale que expliques tus acciones rápido – Remedios Custodio, la Gran Maestra de la Orden de Paladines, habló con un tono lleno de hostilidad.

Para Lurent eso no fue inesperado. Remedios era famosa, o infame dependiendo a quien se preguntara, por muchos motivos. Su rígido sentido de la justicia; su odio por todo lo no humano; su devoción a la reina y su poca capacidad intelectual eran puntos no tan favorables de los que la gente hablaba cuando su nombre era mencionado. Por eso Lurent no se inmutó ante su acusación y, como si no hubiera dicho nada, siguió dirigiéndose a la reina. Actitud que no le gustó a la paladín.

- Majestad, el motivo por el que no dije nada sobre el motivo de esta audiencia es que considero que si esta información cae en oídos equivocados podría desatar el caos, pero bien utilizad a esta información representa una gran oportunidad para el Reino – comenzó a explicar captando la atención tanto de Calca como de Kelart. – Para que entiendan a que me refiero, permítanme explicar cómo llegamos a esa situación.

Después de eso Lurent narró la historia de como zarparon desde Re-Lobell con rumbo a Prart y como al tercer día los de viaje los abordó un tritón como ninguno que hubiera visto para invitarlos un reino del que no habían escuchado. Fue en ese punto, cuando recién iniciaba la historia, que Remedios interrumpió.

- ¿Seguiste a un semihumano a un sitio desconocido? ¿Eres idiota? – preguntó colérica.

- Estoy consciente de que seguir a una persona desconocida a un lugar extraño no siempre es una buena idea, Gran Maestra, pero también soy comerciante y esa era una oportunidad que no podía desaprovechar. Además, mis acompañantes estaban preparados para emprender la huida de ser necesario – respondió con voz monótona.

- ¡Tú! – a Remedios no pareció gustarle su tono, pero la reina intervino pidiéndole a Lurent que continuara su relato.

Continuó narrando como los guiaron hasta una isla con la que jamás se habían topado, astutamente olvidó mencionar el altercado con Ruffus, y detalló cómo fue su experiencia en el lugar. Desde los carruajes en los que se movilizó y las bestias que tiraban de ellos, hasta la abundancia que se notaba en la ciudad en la que había estado. Contó cómo había varias razas viviendo juntas: humanos, elfos, tritones, enanos e incluso razas que no reconoció. Explicó que tuvo una audiencia con los gobernantes del lugar ya que ellos habían sido quienes ordenaron que los invitaran con el fin de entender el mundo más allá de sus costas.

Cuando contó sobre el motivo por el cual nunca se habían topado con la isla, es decir el hechizo que supuestamente los mantenía aislados, Calca se puso pálida solo de imaginar el nivel de magia necesario para tal hazaña. Lurent describió a los tres reyes de aquella isla causando aún más conmoción en las oyentes. Sabían que la Reina del Reino Dragón poseía sangre de dragón en sus venas, pero por como sonaba la descripción de los tres reyes (y por la forma en la que se referían sus súbditos a ellos) parecía que esos tres también poseían sangre de dragón, lo que le daba credibilidad a la historia de una magia sumamente poderosa, pero al mismo tiempo abría las preguntas de que tan peligrosa era esa isla y con qué dragón estaban relacionados.

La historia continuó con Lurent narrando que las preguntas que hicieron los gobernantes eran más que todo generales; cuántos países hay, cuales tenían puertos que los pudiera comunicar con ellos, ese tipo de cosas, nunca preguntaron nada en profundidad.

Por supuesto esa no era la verdad, pero Lurent pensaba que no sería buena idea decir cuántos detalles del panorama político había dejado salir sin darse cuenta durante la conversación por lo que, nuevamente, olvidó mencionarlo.

Tal vez debería tomar algo para mejorar su memoria.

Finalmente les contó a las tres mujeres que, como recompensa por haber accedido a responder sus preguntas, el Gran Rey Magnus accedió a que su compañía pudiera visitar su reino para hacer negocios, así como vender productos producidos por ellos en otros reinos.

- Finalmente, Majestad, traje algunos de los objetos que compré en el lugar para mostrárselo como prueba de lo que he dicho. También me fue solicitado por Lady Morgan que entregara una carta oficial si era posible, la he traído conmigo si Su Majestad desea leerla – diciendo eso Lurent sacó algo de la bolsa que llevaba atada en la cintura: un collar de oro con un dije en forma de ojo plateado y un anillo negro con un zafiro como joya central, ambos objetos eran ítems mágicos fabricados en la isla. – El collar se llama {Ojo de Horus} y tiene la habilidad de darle a su usuario claridad mental en cualquier situación por lo que también funciona como protección contra el control mental y estados que afecten la mente. En cuanto al anillo, su nombre es {Ancile} y está imbuido con un poderoso hechizo de escudo que se supone puede proteger de magia de 5to nivel e impactos físicos de igual magnitud.

Lo cierto es que ambos fueron prototipos diseñados para ser usados por el ejército de la isla, sin embargo, Tiaamat descubrió una manera de agregar todos los efectos mejorados en un solo accesorio y los prototipos casi son descartados, pero un tiempo después, por coincidencia se dieron cuenta que esos objetos serían muy valorados por jugadores novatos y decidieron que su reino empezaría a exportarlos por lo que fueron producidos en masa y actualmente aun eran parte del mercado interno de la ciudad al parecer.

Decir que Calca estaba en shock sería quedarse cortos. Toda la historia era absolutamente increíble, pero sonaba tan real al mismo tiempo que su cerebro no sabía cómo procesarlo. Los detalles que dio Lurent, así como la presencia de los dos objetos mágicos no dejaban lugar a dudas sobre la veracidad de la historia, pero aun así era simplemente imposible asimilar aquello en tan poco tiempo. Después de haberse desconectado de la realidad por lo que parecieron ser horas pero que en realidad fueron solo un par de segundos, recordó lo que había dicho Lurent y le pidió que le entregara la carta que le habían pedido traer.

{Lady Calca Bessarez, Reina Santa de Roble.

Saludos, Majestad, Soy Lady Morgan Le' Acser, Reina de la Isla Soberana de Elion, de la que a esta altura estoy segura de que ya ha escuchado.

En primer lugar, permítame disculparme por el mensaje repentino, así como la confusión que debe estar sintiendo en este momento. Le aseguro que nosotros mismos no esperábamos volver a ser parte del mundo de una manera tan abrupta, pero ya que pasó no podemos simplemente quedarnos sentados sin hacer nada. Creemos que si esto ha ocurrido es una señal de que debemos abandonar nuestro aislacionismo, al menos en cierta medida.

Por lo anterior me dirijo a usted en calidad oficial, como quien dirige las relaciones exteriores de mi reino, para solicitar formalmente que se abran relaciones, por lo menos comerciales, entre nuestros dos reinos.

Comprendo que es difícil, por no decir imposible, confiar en alguien a quien nunca han visto en persona y de quien solo han oído hace pocos minutos por lo que quisiera proponer que una delegación escogida por usted nos visitara en nuestra isla para empezar relaciones diplomáticas, al mismo tiempo estaríamos encantados de enviar una delegación propia para el mismo motivo si Su Majestad nos extiende la invitación.

Espero que pueda pensar en mis palabras.

Atentamente:

Lady Morgan Le' Acser}

Después de leer el texto la Reina Santa no sabía que pensar. El documento en sus manos aclaraba más allá de cualquier duda la veracidad de la historia de Lurent y daba una visión de las intenciones que este nuevo reino tenía respecto a Roble. Kelart, quien también leyó la carta, empezó a analizar los pros y los contras de toda la situación tratando de idear planes partiendo de la información que habían obtenido mientras que Remedios seguía mirando con furia al comerciante.

- Le agradezco que haya reportado todo esto tan pronto, sr Rolland – dijo finalmente la reina luego de unos momentos. – Mis asesores y yo discutiremos sobre lo que nos ha contado y tomaremos una decisión al respecto. Le pido que permanezca disponible ya que podría ser llamado nuevamente si se requiere. También querré tomar posesión de estos dos objetos para un examen más detallados, por lo que estoy dispuesta a pagar para adquirirlos, solo diga el precio.

- Estoy agradecido por su consideración Majestad. Sin embargo, estos dos objetos ya estaban destinados a serle obsequiados – respondió el hombre. – Ahora que ya dije lo que debía, supongo que es momento de regresar a mi negocio, tengo muchos productos nuevos que estoy ansioso por vender.

- Diciendo eso con una sonrisa, y obteniendo permiso de la reina, Lurent salió de lugar y se dirigió al edificio de su compañía en la capital para retomar su rutina comercial mientras esperaba que Brodek y el resto llegaran con los productos y mercancías que habían traído.

Y mientras el comerciante sonreía al pensar en el gran futuro que le esperaba si las cosas se le daban como estaba esperando, la Reina Santa convocó a una audiencia de emergencia con toda su corte para discutir las novedades y al mismo tiempo trataba de descubrir cómo manejar la situación de tal manera que no les diera a los nobles del sur municiones políticas para ser usadas en su contra.

Kelart por su parte ordenó a los agentes de las fuerzas secretas del reino, aquellas que se encargaban de los trabajos menos honorables, que estaban directamente bajo su mando que mantuvieran vigilado a Rolland y lo asesinaran si notaban que estaba tratando de trabajar como espía para alguna nación extranjera.

Para Kelart había una alta posibilidad de que todo esto se tratara de una estratagema de algún país enemigo para desestabilizar a su nación por lo que tuvo que cubrir sus bases antes de que se tomara cualquier decisión. Mientras esperaban que los nobles llegaran para discutir el nuevo hallazgo solo podía rezar a los 4 dioses para que todo saliera bien.

(***)

Había pasado casi una semana desde que Marck llegó a Re-Lobell y comenzó a formar equipo con los cuervos errantes. Durante todo ese tiempo tuvieron un promedio de misiones cumplidas del 100% lo que los volvió algo notorios entre los equipos prometedores de la ciudad. Durante el día el vampiro cumplía misiones para el gremio y se hacía de un nombre y por la noche se infiltraba en los sitios de interés en la ciudad o seguía a personalidades importantes para averiguar cualquier cosa remotamente importante.

A estas alturas quedaban pocos secretos dentro de Re-Lobell que Marck no conociera, si la situación continuaba así en un par de días podría abandonar la ciudad y dirigirse al imperio según las últimas órdenes que le llegaron. Sin embargo, antes de eso tenía un último lugar por revisar, la base local del sindicato del crimen más grande del país.

Era pasada la medianoche cuando Marck paseaba por el muelle, específicamente por el mismo sector en dónde había visto a Lady Amriell por última vez. Después de estar en la ciudad por varios días descubrió que era un secreto a voces que los almacenes de esta parte del muelle eran los que utilizaban los 8 dedos para sus cargas por lo que nadie se acercaba al lugar.

Mientras caminaba aparentemente sin rumbo fijo se acercaba a las partes más remotas del lugar y al llegar a un área un poco abierta, con poca iluminación y un silencio sofocante murmuró para sí mismo mientras se detenía:

- Supongo que este será el mejor lugar – volteando hacia las sombras proyectadas por uno de los almacenes volvió a hablar – Si van a seguir a un explorador deberían esforzarse más en pasar desapercibidos. Aunque admito que las capas que tienen son algo que nunca había visto, hechas con la piel de algún monstruo con habilidades de sigilo por lo que puedo notar. Si se tratara de alguien menos hábil podrían haberse salido con la suya.

- Parece que no tiene sentido seguir ocultos – dijo Glenda, la líder de silver wings saliendo de la cobertura de las sombras seguida por su equipo. – Admito que no esperaba que lo notaras.

- Supe de ustedes desde el primer día cuando volví de matar Barghest, simplemente no representan una amenaza por lo que los dejé hacer lo que quisieran, pero empieza a volverse fastidioso – la voz carente de emoción del hombre les hizo sentir escalofríos. - ¿Les importaría decirme por qué el grupo de aventureros mejor clasificado en la ciudad está empeñado en acecharme?

- Pues la verdad es que nos sentimos un poco curiosos – respondió Glenda con voz serena, pero al mismo tiempo ella y sus compañeros estaban preparados para empezar a pelear. – Un hombre extraño aparece de la nada en la ciudad, y al intentar averiguar un poco sobre él no es posible encontrar nada. Como si simplemente apareciera y ya. Así que decidimos seguirlo y pudimos verlo colarse en lugares prohibidos para los civiles y seguir a personas importantes de la ciudad, sin mencionar que frecuentemente visita un sector del muelle conocido por ser utilizado por los 8 dedos. Estoy segura de que podrás entender nuestra preocupación – para este punto los aventureros estaban rodeando al vampiro en posición de combate.

Ya veo, parece que solo se trata de mocosos siendo entrometidos y no de alguna misión especial del gremio – Marck habló para si mismo. – Aun así, será mejor que me asegure. [Atadura de Sombras].

Un simple hechizo de 4to nivel, pero reforzado hasta ser tan poderoso como el 7mo nivel gracias a su especialización en Umbramancia, fue todo lo que se necesitó para capturar al mejor equipo de aventureros de Re-Lobell y dejarlos completamente fuera de combate. Al verlos completamente impotentes, Marck pasó su mano por el brazalete que tenía en la muñeca izquierda haciendo brillar una runa y liberando la ilusión que lo cubría.

El Lord vampiro dejó de ocultarse liberando el hechizo contenido en el brazalete, una ilusión rúnica creada por Lord Magnus cuyo único propósito era que los seres heteromórficos parecieran humanos. Fue sumamente útil en infiltraciones durante las guerras de gremio. Por supuesto lo que se vendió a los extranjeros en aquel tiempo fue una versión del objeto que solo alcanzaba el rango legado, mientras que los utilizados por los residentes de la isla pertenecían al rango legendario.

Si antes estaban asustados, Glenda y sus compañeros ahora estaban aterrorizados y al borde de un colapso. Podían reconocer a un vampiro, no era la primera vez que se topaban con uno, pero generalmente son esclavos o vampiros menores en el peor de los casos, los tipos de vampiros más débiles pero que aún necesitan la participación de al menos tres grupos rango Mithril para derrotarlos con seguridad; pero el que tenían frente a ellos no era un vampiro menor.

Para empezar cualquier vampiro por debajo del rango de "anciano" moriría inmediatamente si se pusiera bajo el sol, pero Marck no parecía tener ninguna dificultad en ese aspecto; en segundo lugar, los no-muertos emiten un aura especial, algo contrario a todo lo que la vida representa, y esa aura es muy fácil de detectar para alguien como un clérigo, sin embargo, no había nada de eso en Marck, al menos no hasta que deshizo su ilusión. Silver wings finalmente comprendió el error que habían cometido, estaban ante un vampiro del más alto orden, alguien como el infame Señor Vampiro Landfall que destruyó todo un país en una noche. Acercándose a Glenda, Marck se aseguró de mirarla a los ojos antes de empezar.

- [Encantar especie] – sus ojos rojos brillaron al mismo tiempo que los de la aventurera perdieron el foco. – Cuéntame, Glenda, ¿la historia que me contaron es cierta? ¿No le mentirías a un amigo cierto? – [Encantar Especie] era un hechizo de control mental que hacía creer a las personas (NPC's en Yggdrasil) que el usuario es un buen amigo a quien está dispuesto a ayudar.

- Claro que no te mentiría, eres mi amigo después de todo. Sí, todo lo que dijimos es cierto – respondió la mujer con una sonrisa. Ya veo, ¿y alguien más sabe que me han estado siguiendo? – los compañeros de Glenda notaron a donde quería llegar Marck y no les agradó.

- No, creímos que sería mejor mantenerlo entre nosotros hasta que tuviéramos algo concreto.

- Eso es perfecto, Glenda, significa que ustedes me pueden ser muy útiles en este momento y no hay riesgo de que todo regrese a mi – la sonrisa depredadora en su rostro hizo temblar a los aventureros.

- En primer lugar, lo siento chicos, pero necesito que alguien sirva como cebo y, siendo sincero, si voy a empezar mi propio aquelarre en esta zona prefiero que sea con lindas novias vampiro y no con vampiros menores así que espero que no se lo tomen personal – diciendo eso Marck movió sus manos y ambas cabezas rodaron por el suelo. – Ahora, es momento de su cambio.

Para este punto el hechizo en Glenda se había roto y tanto ella como, Silvia, la arquera veían horrorizadas los cuerpos decapitados de sus amigos y al hombre responsable caminando tranquilamente hacia ellas. Marck extendió su mano y con su propia uña, tan afilada como una navaja, se realizó un corte en la muñeca que empezó a sangrar poco a poco y acercándose primero a una Silvia sollozante, enterró su mano sangrante en el corazón de la mujer.

- [Crear Engendro: Novia Vampiro] – con sus palabras una niebla sangrienta rodeó el cuerpo de la arquera de cuyos ojos la vida parecía haber escapado. La capa corta que usaba junto a la armadura de cuero que tenía debajo se volvieron de un negro intenso y los cisnes bordados en los hombros de la capa se transformaron en un lobo y un búho.

- ¿Cuáles son sus órdenes, maestro? – era la misma voz que Glenda conocía, el mismo rostro, las mismas expresiones; pero no era la misma persona. Ahora, frente a ella, estaba un monstruo obediente esperando instrucciones de su amo. Marck no respondió, sino que se acercó a su siguiente víctima y repitió su acción anterior.

Al igual que con Silvia el atuendo de Glenda cambió con su transformación. La capa plateada que la caracterizaba se volvió negra y los cisnes bordados nuevamente se transformaron el lobos y búhos. Su piel se volvió pálida y sus ojos rojos. Al final incluso su voluntad se vio destrozada cuando desde lo más profundo de su ser se alegró de estar al servicio de un Lord Vampiro. Ese fue el final del equipo de aventureros Silver Wings.

Sin tiempo que perder, Marck empezó a preparar el anzuelo con el que esperaba atrapar a los 8 dedos, o al menos a la rama local. Ordenándole a sus nuevas sirvientas que arrastraran los cuerpos hasta un lugar donde serían fácilmente descubiertos al día siguiente empezó a preparar la escena.

Ambos cuerpos fueron clavados a la pared de uno de los almacenes como si hubieran sido crucificados; les cortaron 1 dedo de cada mano dejando un total de 8 y sus cabezas, que habían sido dejadas en el interior de dicho almacén, estaban sin ojos y sin lengua. Una vez todo estuvo terminado se alejó con las novias vampiro y volvió a la habitación de la posada que había estado utilizando.

- Mi señor, ¿por qué nos tomamos el tiempo de preparar toda la situación de esa forma? – preguntó Glenda.

- Es una trampa – dijo secamente el hombre antes de explicar. – La forma en que dejamos los cuerpos y el lugar donde se encuentran apuntan a que fueron testigos de algún negocio de los 8 dedos y por eso fueron asesinados y dejados a modo de mensaje. Por otro lado, los 8 dedos sabrán que no fueron ellos lo que significa que hay alguien matando en su territorio y culpándolos por sus crímenes. Además, el hecho de que las dos mujeres del grupo no estén sugiere que fueron secuestradas lo que también es un ataque a su control sobre el tráfico de esclavos.

- Ya veo. Como imperio criminal no se pueden quedar de brazos cruzados ante un desprecio tan obvio a su organización así que se verán obligados a actuar – concluyó Glenda obteniendo un asentimiento por parte de Marck.

- Por otro lado, ustedes deben mantenerse ocultas durante el día y esta habitación no es óptima para eso. Además, una vez que nos vallamos de la ciudad necesitaré que trabajen conmigo incluso durante el día así que necesitamos hacer algo con su debilitamiento – explicó el mayor lo que tenían que hacer. – Supongo que debo solicitar apoyo a la isla. [Mensaje].

- ¿Oh? Eres el Lord Vampiro asignado a Re-Lobell ¿no es cierto? Usualmente envías tus reportes por medio de familiares, ¿qué podría ser tan importante como para contactarme directamente? – la voz suave y refinada de Elizabeth B. Darkblood se escuchó en su cabeza cuando el hechizo se conectó.

- Mi señora, en esta ocasión creí que era mejor hablar con usted directamente, ya que aparte de mi informe quisiera solicitar equipo para continuar mi misión – Lurent procedió a informar todo lo ocurrido esa noche, incluida la creación de dos novias vampiro y la trampa tendida a los 8 dedos.

- Autorizaré el envío de equipo de protección para tus subordinadas ya que te serán más útiles si están contigo en todo momento. En cuanto al asunto de los 8 dedos usaremos la oportunidad que creaste, pero el encargado será otro, tú estarás en otro lugar muy pronto.

- ¿Puedo preguntar quién se hará cargo?

- En dos días llegarán a Re-Lobell los nuevos encargados de infiltrarse en Re-Estize, 2 {Hanzos} y 30 {Demonios de sombras}. Como realmente no queremos tener presencia en el reino, sino que simplemente estamos buscando información eso debería bastar. Uno de los Hanzos se hará cargo del asunto de los 8 dedos para que tú puedas concentrarte en tu nueva misión.

- Entonces esperaré nuevas órdenes.

Con esas palabras terminó la discusión y volvió a avanzar en la oscuridad de la noche seguido por las vampiresas buscando un lugar donde las mujeres pudieran mantenerse durante el día mientras él actuaba como aventurero.

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Wenaaaassss

¿Qué tal el capítulo? Estoy a unos dos o tres capítulos de terminar de escribir el primer volumen con un total de 30 caps y tengo una pregunta, ¿les gustaría que Magnus y las chicas tuvieran alguna clase de "estado"? obviamente estaría basado en Yggdrasil, pero les permitiría vigilar constantemente su avance. Sinceramente me parece una buena idea pero hay algo que no me termina de cuadrar así que pensé en preguntar.

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Nos Vemos!!!!

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